Seis jóvenes espeleólogos narneses desenterraron el yacimiento en 1979. Desde entonces, un numeroso grupo de voluntarios la ha ido recuperando y mejorando. En la impresionante iglesia subterránea del siglo XIII, dedicada al Arcángel San Miguel, revivirás sus fases históricas gracias a un sistema multimedia mientras admiras recientes descubrimientos arqueológicos. La iglesia, probablemente construida sobre estructuras más antiguas, se incorporó al Convento de los Dominicos hacia el siglo XIV. Todo el complejo fue saqueado en 1860 y destruido durante la Segunda Guerra Mundial. Durante los años de abandono, el agua de lluvia cubrió de piedra caliza los numerosos frescos, que ahora vuelven lentamente a la luz gracias a recientes restauraciones. Fue reconsagrada en 2000 con el nombre de Santa María del Acantilado, ya que aún no se había descubierto la advocación original.
En la sala contigua, gracias a un vídeo interactivo, se pueden conocer los sistemas de excavación de acueductos en la Narnia romana entrando virtualmente en el túnel. En el corazón del subterráneo se conservan las mazmorras del Santo Oficio, creadas para combatir las herejías, de las que queda intacta una celda. Gracias a los Archivos Vaticanos, fue posible reconstruir la historia de algunos de los prisioneros, que dejaron su testimonio grafiteado en las paredes de una estrecha celda. La visita continúa para descubrir la iglesia superior con el precioso mosaico bizantino de la primera catedral de Narnia y otros numerosos restos y frescos. No será la visita guiada habitual: ¡no seréis meros espectadores, sino protagonistas de acontecimientos increíbles!